21 de junio 2020 11:22 por: María Mogollón
Edición 141 - Junio 2020 • Quito
El tercer domingo de junio se conmemora el Día del Padre. No es necesario explayarnos con frases elocuentes por su celebración; simplemente queremos festejar su día con respeto y admiración, porque es el ser que conduce a sus hijos por la senda del bien, de la honestidad y rectitud, utilizando como su mejor aliado el afecto inquebrantable que guarda para cada uno de sus hijos.
PADRE ES EL HOMBRE QUE GUÍA A SUS HIJOS, sean niños, jóvenes o adultos, y con su fuerza espiritual endereza el camino de aquellos hijos que están tomando sendas equivocadas.
Para el Padre, sin importar su profesión: arquitecto, doctor, transportista, abogado, chofer o jardinero, sus hijos son el aliciente para continuar luchando y salir adelante en los períodos difíciles por los que todo ser humano atraviesa. Y cuando las circunstancias en el trabajo le son favorables, solamente se siente realizado cuando sus hijos van cumpliendo las metas que se han propuesto: en los estudios, en el amor, en el desarrollo profesional.
Él está plenamente realizado cuando mira a sus hijos contentos, alegres, llenos de vida.