19 de agosto 2020 6:00 por: Carlos Navarrete
Edición 142 - Agosto 2020
Solo opera la mitad de la flota (25 unidades) de Coop. El Puma y apenas cubren los costos operativos. En la mayoría de los recorridos, lo usual es ver buses casi vacíos. “La ciudadanía poco utiliza los buses, más se inclina por taxis y el transporte informal, como las motocicletas”, señala José Herrera, gerente.
La pandemia ha causado serios estragos en la economía de los propietarios de las unidades y pese exponer el problema a las autoridades, no hemos tenido respuesta o retribución puesto que se trabaja a pérdida. Considerando que el transporte urbano es un servicio a la comunidad no hemos dejado de laboral durante la emergencia. “Le pedimos al alcalde, Abraham Freire, que nos apoye con el combustible, pero dijo que no hay recursos por cuanto el Gobierno no les deposita a tiempo los fondos que les corresponde”.
La situación es caótica para los socios que adquirieron nuevas unidades y muchos las acondicionaron mejor. “Las deudas con entidades bancarias apremian. A esto se suma la competencia de taxis y motos ilegales”.
Respecto a la revisión vehicular, la empresa solicitó al Alcalde que este año sea una excepción, “pues significa otro egreso y las condiciones no permiten realizar gastos”, dice Herrera.