20 de octubre 2020 10:00 por: Jorge Ricardo Cornejo
BV 143 - Octubre/Noviembre 2020 • Esmeraldas
La crisis económica golpea al sector. Dueños de unidades que hace no mucho tiempo requerían de un conductor contratado, en los actuales momentos se han visto en la imperiosa tarea de prescindir de sus servicios y salir a laborar ellos mismos, incluso hasta el oficial ha sido relegado.
Dialogamos con socios de cooperativas urbana e intraprovincial de la provincia y el factor común es el mismo: los dueños han vuelto al volante. Para Germán Mera, socio de Coop. del Pacífico la situación actual y la baja producción han sido determinantes para manejar su vehículo. “Estuvimos parados tanto tiempo, las deudas crecieron y la economía en el hogar hicieron que tenga que subirme yo mismo al bus porque lo poco nos alcanza para comer en el hogar, es difícil reunir dinero para pagar letras, por eso seguiré conduciendo”.
Gerónimo Quinde, socio de Coop. Urbana Las Palmas ha retornado al volante luego de varios años y con su avanzada edad debe salir solo y obligado a laborar porque el diario que se destinaba para chofer y oficial ahora ya no existe.
“Da pena que varios empleos se han perdido, los transportistas generamos trabajo al juguero, la señora de la comida, los carameleros y más. Esta pandemia nos ha dejado perdidas por todos lados. Espero que mejore el trabajo y se normalice todo para que el conductor que me ayudaba retome su trabajo” dijo Quinde.