22 de febrero 2021 9:00 por: María Mogollón
BV 145 – Febrero/Marzo 2021 • Quito
El “disco duro cerebral” de los seres humanos, está programado para que nos deleitemos con el dulce sabor del azúcar que está presente en todo tipo de alimentos.
Helados, colas, galletas, gelatinas, bebidas dulces, etc. son alimentos codiciados que contienen azúcar refinada sin ningún valor nutricional, pero SI CONTINEN un alto porcentaje de calorías “vacías” sin minerales ni vitaminas. Además, generan hambre debido a que se absorben rápidamente. Cuando hay exceso de consumo del azúcar, ésta no se quema como energía y el hígado la transforma en grasa.
Éste es el inicio de serios problemas de salud, entre los que se destacan:
Diabetes y Obesidad. Quienes consumen diariamente gaseosas y bebidas energéticas corren un riesgo mucho más alto en desarrollar la diabetes. Aparte de la diabetes, el consumo de gaseosas, al ser ricas en azúcar, conduce al incremento de peso y su exceso a la obesidad.
Hígado graso. El hígado es el único órgano responsable de procesar los azúcares; por eso, cuanta más azúcar se consuma, el hígado tendrá mucho más trabajo. Este exceso lleva al hígado a desarrollar esteatosis hepática (hígado graso). Se puede revertir, aunque no curar totalmente, mediante una dieta adecuada y actividad física. Se sugiere consumir limón con cierta regularidad.
Cáncer de páncreas. Éste es uno de los cánceres más mortíferos y es consecuencia del sobreconsumo de azúcar. En las primeras etapas no se presentan síntomas; pero en las más avanzadas son poco específicos, como la pérdida de apetito y de peso. Su tratamiento requiere extirpación quirúrgica del páncreas.
Insuficiencia renal crónica: Es una pérdida progresiva e irreversible de las funciones renales. Un estudio realizado en USA reveló que el exceso de consumo de bebidas ricas en azúcar pueden ser su causa. Esta enfermedad puede controlarse ligeramente con la restricción de alimentos ricos en proteínas como: atún, queso parmesano, yogur, jamón entre otros y, desde luego, suprimir el azúcar.
Hipertensión arterial. Los últimos estudios señalan que el consumo diario de 74 gramos de azúcar está relacionado con el riesgo de sufrir hipertensión arterial. La solución es controlar la ingesta de azúcares.
Destrucción del esmalte dental. ¿Tiene “dolor de muelas”? Esto se debe a que las bacterias que se alimentan del azúcar de los alimentos que ha ingerido generan el ácido que a su vez destruye el esmalte dental.
Signos y síntomas de una alta concentración de azúcar en la sangre
Orinar mucho: los riñones funcionan expulsando la glucosa sobrante a través de la orina. Por eso necesita orinar más a menudo y en mayores cantidades.
Beber mucho: al perder gran cantidad de líquido a través de la orina, suele tener mucha sed.
Perder peso a pesar de no haber perdido el apetito: Si no hay suficiente insulina para ayudar al cuerpo a utilizar la glucosa, este tendrá que descomponer el músculo y la grasa almacenada en un intento de proporcionar combustible a las hambrientas células.
Estar agotado: Cuando hay exceso de azúcares en el cuerpo, el hígado no puede utilizarla como fuente de energía, en consecuencia la persona puede sentirse inusualmente cansada.
Atención amigos transportistas, la industria de alimentos alzó la voz victoriosa indicando numerosos productos “bajos en grasa”, pero lo peligroso es que realmente tienen niveles escandalosos de azúcar.
Es decisión de cada uno de nosotros saber alimentarnos adecuadamente seleccionando los productos que no afecten a nuestra salud.