Alison Salinas, la menor pero la más experimentada trailera.

19 de agosto 2020 6:00 por: Maritza Guevara
Edición 142 - Agosto 2020

Tengo 23 años, soy la menor, pero la que más pasa en la carretera. Apenas cumplí 18 obtuve la licencia profesional. El tráiler manejo desde hace casi 4 años. Empecé a trabajar en Hormigones del Azuay transportando desde Lasso a Cuenca o cualquier lugar. Actualmente estoy trabajando en la Amazonía llevando papa china y balsa hacia Manabí y regreso con fertilizantes.

¿Cuando sale de su casa en cuánto tiempo regresa?

Básicamente siempre paso viajando. Solo ahora por el Covid estamos pasando por una situación crítica pues los viajes son una vez a la semana lo cual implica tres días. Anteriormente, llegaba a casa el sábado y el domingo volvía a salir. Solo llegaba a saludar y cambiarme de ropa. Al inicio de la pandemia no había donde comer, mi esposo y yo nos moríamos de hambre. Ahora está mejor conseguir alimentación.

Mi esposo Klever González tiene 34 años, ama los carros grandes y conoce bien cómo manejar una carga pesada. Yo tengo habilidad para estacionar y cuadrar un tráiler, el distanciamiento en curva; entonces, los dos nos apoyamos. Mi esposo maneja durante el día y yo manejo durante la noche. Soy consciente de que las vías son peligrosas porque cualquier cosa puede pasar.

¿Cómo controla un vehículo grande encarretera?

Uno de los momentos más complicados es cuando hay carga pesada o extra pesada en una curva, bajada o cuesta, pues se debe tener el control del largo del vehículo porque si llegara a saltar la marcha se daña la caja de cambios. Si en una bajada se maniobra mal el “dual”, la caja se neutraliza y por ende, me quedo sin marchas. 

Un ejemplo de viaje

Salgo de casa en Ambato hacia El Tena por lo general a las 10 u 11:00 p.m. Tipo 1 de la mañana llego a El Puyo para descansar en una gasolinera, dormir y levantarnos a las 5 de la mañana para continuar hacia El Tena a donde se llega por las 7:30 a.m. para desayunar. Luego vamos al acopio y pedimos que descarguen. Tipo 6 ó 7 de la noche con el embarque listo vamos a merendar para salir hacia Pedernales. Yo tomo el volante desde las 11:00 p.m. hasta las 3 de la mañana cuando se despierta mi esposo para continuar manejando. Llegamos al destino tipo 5 o 6 de la mañana. Una vez entregada la mercadería, volvemos a cargar para salir de nuevo.

Emergencia solo por 80 centavos

En el camino se vive de todo, pero una vez cuando recién nos compramos el tráiler encargamos que nos den enganchando la plataforma con la cabeza, pero faltaba una de las “chupas” por lo cual no pasaba suficiente aire para desbloquear la carreta y tampoco para frenarla. Sin saberlo nos fuimos de viaje y cargamos 40 toneladas. Cerca del “Trópico” en la bajada de Sangolquí no cogieron los frenos y nos asustamos mucho,  pero mi esposo logró recuperar el control bajando las marchas y, gracias a Dios, no nos pasó nada. El tramo de Lasso a Tulcán lo hacíamos en 9 horas, pero luego de lo ocurrido, este viaje lo hicimos casi en 18 horas porque no sabíamos que pasaba. Cuando regresamos a casa supimos que el problema fue la “chupa” que solo cuesta ¡80 centavos! Así aprendí la lección que no hay que confiar tratándose del vehículo.

Mi estímulo va para todas las mujeres 

Ya que todas tenemos una lucha diferente y somos capaces de hacer todo: ser profesionales, madres, amigas, hijas, hermanas. No debemos dejarnos subestimar por nadie porque valemos muchísimo. Cada propósito que tengamos debemos cumplirlo aunque sea chiquito porque no hay nada más satisfactorio como sentir la admiración de quienes dicen: “Wow lo logró” y que te admiren.

Anita mi estrella del camino.

Mi nena hoy tiene un año y medio. Ella es el mayor impulso que tengo para trabajar y esforzarme. Quiero ser cada día mejor y superarme para que ella tenga en mi a un ejemplo de vida. Mi aspiración para el futuro es poder cuidarla mejor, especialmente cuando empiece su vida estudiantil. 

Conoce más sobre las damas traileras: https://bit.ly/2EcauKP